martes, 1 de abril de 2025

PLANO-CHAKRA DIGITAL GARGANTA 5.0 VIERNES: MODULACIÓN DE LA MÁSCARA INJUSTICIA (ID.5)

 




  Incorporación de  las  personas chakra  al carrusel de Máscaras digitales  para el Viernes en Arcade Madrid: Chakra Digital Garganta 5.0

  1. Transición desde Chakra Corazón: El jueves, el Chakra Corazón simbolizó la sanación de la herida de traición, enfocándose en abrirse a la confianza y al amor propio. Este proceso preparó a los participantes para la activación del Chakra Garganta 5.0, permitiendo la expresión de su verdad y justicia desde un espacio sanado.

  2. Chakra Digital Garganta: El viernes, este plano se centra en la modulación de la máscara de injusticia (ID.5). Aquí, la energía digital se proyecta en los cuadrantes tres y cuatro, donde los participantes trabajan en:

    • Cuadrante Tres: Reconocer las verdades individuales ocultas por la injusticia percibida y manifestarlas con autenticidad. Aquí se fomenta la conexión interna con el yo auténtico.

    • Cuadrante Cuatro: Expresar estas verdades hacia el exterior, en interacción con otros. Este cuadrante está dedicado a la comunicación empática y efectiva, rompiendo barreras de incomprensión.

  3. Integración de los Cuadrantes: Según los criterios de los esquemas del poeta panóptico Raúl Ximénez, se aplican las siguientes herramientas:

    • Proyección visual: Cada participante proyectará su energía Chakra Garganta hacia los cuadrantes usando formas digitales, representando su proceso de modulación.

    • Interacción grupal: Ejercicios en parejas o equipos que promuevan la justicia equitativa y la escucha activa.

    • Reflexión digital: Uso de un medio digital donde cada participante escriba o grabe su experiencia, para compartirla al finalizar.

  4. Cierre del Viernes: Concluye con un círculo grupal en el que se unen las energías proyectadas de los cuadrantes, consolidando el aprendizaje y la expresión obtenida.

Para terminar Raúl les hablaría a las personas Chakra sobre las heridas como si les estuviera guiando en un viaje de autocomprensión:

"Cada uno de ustedes, como personas Chakra, carga heridas que no solo afectan sus interacciones en el mundo físico sino también en el mundo digital. Estas heridas están vinculadas con cada chakra, pero lo importante es reconocer cómo se manifiestan y cómo las máscaras que usamos para protegernos se adaptan a estos entornos analógico y digital.

Por ejemplo, la herida de abandono asociada al Chakra Raíz genera un vacío físico: una sensación de desconexión con nuestra base o raíz en el mundo tangible. En el mundo digital, esta herida se traduce en aislamiento, en la percepción de no encajar dentro de las redes digitales, donde muchas veces buscamos conexión y no la encontramos.

Luego está la herida de rechazo vinculada al Chakra Sacro. En el plano físico, puede ser la incapacidad de aceptar nuestra propia creatividad o incluso nuestro ser. Pero en el digital, se ve reflejada en la búsqueda constante de aprobación, en los likes, en el refuerzo externo que valida nuestra presencia virtual.

Cuando hablamos del Chakra Plexo Solar, vemos la herida de humillación. En lo analógico, es ese peso que nos hace sentir inadecuados, no suficientemente buenos. En el entorno digital, aparece en el temor al juicio, a exponerse tal como uno es.

El Chakra Corazón, que ayer fue nuestro enfoque, lleva la herida de traición. En el plano analógico, aparece como rupturas en la confianza emocional. En el digital, es esa sensación de falta de reciprocidad o entendimiento dentro de nuestras relaciones online.

Y hoy, en el espacio del Chakra Garganta, abordamos la herida de injusticia. En el mundo físico, esta herida surge de no poder expresar nuestra verdad, quizás por miedo o incomprensión. En el plano digital, se refleja en la autocensura, en la dificultad para comunicarse con autenticidad."

"Ahora que hemos hablado de las otras heridas, quiero centrarme en las del Chakra Tercer Ojo y el Chakra Corona, ya que estas conectan con aspectos profundos de nuestra percepción y espiritualidad, tanto en lo analógico como en lo digital.

Para el Chakra Tercer Ojo, hablamos de la herida de intuición apagada.

  • En el mundo analógico, esta herida se manifiesta como una desconexión de nuestra capacidad de confiar en nuestra propia percepción e instinto. Las personas pueden sentirse perdidas, como si no pudieran distinguir claramente entre lo que es verdadero y lo que no.

  • En el mundo digital, esta herida se traduce en la sobreexposición a información que nubla nuestra capacidad de discernir. Es la confusión que surge al navegar por noticias falsas, datos conflictivos y la falta de confianza en lo que vemos online.

Por otro lado, el Chakra Corona está relacionado con la herida de desconexión espiritual.

  • En el plano analógico, esta herida puede sentirse como una separación de un propósito mayor o de una conexión con lo trascendente. Es esa sensación de vacío existencial o de estar desconectado del universo.

  • En el plano digital, surge como la pérdida de un sentido real en el mar de interacciones superficiales. Es esa sensación de que todo es efímero, que las conexiones online no llenan un espacio significativo en nuestras vidas.

Máscaras y heridas en estos chakras:

  • En ambos casos, las máscaras analógicas son mecanismos de defensa que ocultan estas heridas: por ejemplo, negar la necesidad de espiritualidad o proyectar una seguridad excesiva en las propias decisiones.

  • Las máscaras digitales, en cambio, pueden incluir la creación de una imagen de certeza y propósito en las redes, aunque internamente haya confusión o vacío.

Lo importante es comprender que, en ambos casos, estamos lidiando con una desconexión: ya sea de nuestra intuición o de nuestra espiritualidad. Es clave integrar estos dos mundos, analógico y digital, para reconectar con nuestra intuición y con ese propósito mayor que todos buscamos, ya sea en lo físico o en lo virtual."

Acto seguido, Raúl aclararía luego las diferencias entre máscaras y heridas digitales y analógicas:

"Las máscaras digitales y analógicas son mecanismos de defensa que surgen de nuestras heridas. La máscara analógica es la que mostramos en el mundo físico, como proyectar confianza excesiva para esconder inseguridades. En el mundo digital, la máscara se adapta: quizá creamos perfiles ideales para protegernos de la vulnerabilidad de ser reales.

Por otro lado, las heridas analógicas son las que vivimos en interacciones cara a cara, mientras que las digitales nacen del contexto único de los espacios virtuales: del anonimato, de la presión de mantener una identidad 'perfecta' o de los choques emocionales en línea."

Por último, Raúl invitaría al grupo Chakra a reflexionar: "La clave está en integrar ambos planos, entender cómo nuestras heridas y nuestras máscaras interactúan en estos mundos. Este discernimiento les permitirá avanzar hacia una expresión auténtica que pueda sanar tanto en lo físico como en lo digital."


lunes, 31 de marzo de 2025

PLANO-CHAKRA ANÁLÓGICO SACRO 2.0 MARTES: SANACIÓN DE LA HERIDA ABANDONO (id.2)

 




En el entorno híbrido de Arcade Madrid, donde los rascacielos reflejan la intensidad de las luces urbanas, se congregaron en un martes especial las personas-chakras, convocadas por el poeta y visionario Raúl Ximénez, creador del método panóptico. Transformando el espacio en un vórtice de energías digitales y analógicas, Arcade Madrid se convirtió en el epicentro de un intercambio cuántico  y  emocional sin precedentes.

Con la voz calmada y magnética de Raúl como guía, la asamblea se llevó a cabo en una futurista sala interactiva, rodeada de pantallas holográficas que proyectaban fractales energéticos. Las conexiones universales, representadas por los chakras Garganta 5.0, Plexo Solar 3.0 y Corazón 4.0, se sincronizaban con la resonancia energética del chakra del día (sacro 2.0). “Hoy”, anunció Raúl, “activaremos las energías del chakra analógico sacro 2.0. Nos enfocaremos en los cuadrantes uno y dos del disco panóptico, moviéndonos entre los encuadres del 'desconocimiento' y el 'conocimiento' para amplificar nuestra señal cuántica, apelando al  quantum  telepático, y que ésta  pueda  converger con la frecuencia  del chakra 2.0.”

Los portadores de las energías esenciales se sentaron en torno a una mesa iluminada, cada uno con su token irradiando una vibración particular: rojo para Fernando y su fuerza; amarillo para Silvia, símbolo de vitalidad; azul celeste para Luis y su paz; naranja para Natalia y su creatividad; verde para Pedro, portador de equilibrio; y violeta para Antonio, maestro de sabiduría.

Meditación Panóptica y Conexión Energética

Raúl guio a los asistentes en una profunda meditación panóptica. Cerrando los ojos y conectando con sus energías, visualizaron un fractal digital emergiendo del chakra sacro 2.0. Una luminosa onda naranja recorría los cuadrantes energéticos del disco panóptico y se elevaba hacia las pantallas holográficas, creando una conexión con la urbe tecnológica que los rodeaba.

En cada participante, una chispa cuántica comenzó a fluir: Fernando sintió el liderazgo fusionarse con la empatía; Silvia vio revitalizada su creatividad; Luis descubrió nuevas conexiones en su comunicación; Natalia encendió su pasión con innovación; Pedro reforzó su equilibrio con compasión; y Antonio transformó la sabiduría en acción.

Intercambio Cuántico en los Encuadres

A medida que pivotaban entre los encuadres de “desconocimiento” y “conocimiento,” Arcade Madrid se llenó de una vibración resonante. Los fractales en las pantallas se sincronizaban con las emociones transformadoras de los asistentes. Raúl concluyó la sesión con un mensaje inspirador: “Es en la intersección entre lo urbano y lo espiritual, entre lo digital y lo analógico, donde encontramos la clave para expandir nuestra consciencia. Este es el camino del ser panóptico.”

Con energías renovadas y una visión revitalizada, los participantes salieron de Arcade Madrid, llevando consigo una conexión más profunda con su esencia y con el ritmo vibrante de la ciudad. En sus mentes y corazones, resonaba la invitación de Raúl: “Llevad este equilibrio a vuestra vida, transformad el abandono en unión y el desconocimiento en conocimiento.”


PLANO-CHAKRA DIGITAL RAÍZ 1.0 LUNES: MODULACIÓN DE LA MÁSCARA DE RECHAZO (ID. 1.0)

 



En el vibrante corazón de Madrid, cerca de la icónica Puerta de Alcalá, un centro sociocultural se convertía en un vórtice energético para un evento único. Era un Lunes especial, marcado por la disposición de energía del Chakra Digital Raíz 1.0 y el reto de modular la máscara del "rechazo".

Encuentro Chakral en Madrid

El reconocido poeta madrileño Raúl Ximénez, creador del revolucionario método panóptico, guiaba la asamblea con maestría y sensibilidad. Llevaba un token rojo vibrante como emblema de conexión y fuerza, animando a los presentes a abrazar su esencia terrenal. En el centro de la sala, una instalación de luz proyectaba un arco iris simbólico de los chakras, desde la corona hasta el raíz.

Raúl inició la sesión apelando al Quantum Sensorial, una experiencia profunda que amplificaba las frecuencias cuánticas de los chakras. En este caso, se centraron en un triángulo energético esencial: Corona 7.0, sacro 2.0 y Tercer Ojo 6.0. Con estas energías interconectadas, se prepararon para una meditación guiada diseñada para invocar y recalibrar el Chakra Raíz.

Meditación e Intercambio de Energías

Los participantes, cada uno portando un token que simbolizaba su energía dominante, formaron un círculo alrededor de Raúl. El poeta comenzó con una invocación poderosa:

"Desde la raíz de la Tierra hasta la expansión del cosmos, somos canales de energía pura. Dejemos que el rechazo se deshaga, que nuestras máscaras se transformen en virtudes de pertenencia y conexión."

Bajo su dirección, los asistentes participaron en un intercambio de tokens que simbolizaba la transferencia de energías. Un arco iris de luz cuántica envolvía la sala mientras cada máscara de rechazo se disolvía, dando paso a virtudes como el respeto, la seguridad y el compromiso.

Este lugar, lleno de vida y energía, se convertía en el escenario de un encuentro especial entre las siete personas-chakras guiadas por Raúl Ximénez. Esteban, con su energía de liderazgo, llevaba un token rojo intenso, símbolo de la fuerza y la determinación. Vega, con su espíritu de esperanza y renovación, sostenía un token amarillo brillante, representando la alegría y la vitalidad. Bárbara, con su sabiduría serena, tenía un token azul celeste, emblema de la paz y la comunicación. Raquel, con su creatividad desbordante, portaba un token naranja, símbolo de la inspiración y la pasión. Pedro, con su energía de equilibrio, llevaba un token índigo, representando la intuición y la percepción. Sofía, con su corazón lleno de amor, tenía un token verde, símbolo de la compasión y la sanación. Saúl, con su intuición profunda, sostenía un token violeta, emblema de la sabiduría y la percepción. Esteban habló primero, su voz llena de convicción: “He sentido la necesidad de un liderazgo fuerte y justo en nuestro mundo. Es hora de actuar.” Vega asintió, sus ojos brillando con optimismo. “Y yo he visto cómo la esperanza se desvanece en muchos corazones. Necesitamos revitalizar esa chispa.” Bárbara, con una sonrisa tranquila, extendió su token azul celeste. “La paz y la comunicación son esenciales. Juntos, podemos construir puentes y sanar divisiones.” Raquel, con una chispa de creatividad en sus ojos, añadió: “La inspiración y la pasión son el motor del cambio. Debemos encender esa llama.” Pedro, con su presencia equilibrada, concluyó: “La intuición y la percepción nos guiarán. Debemos confiar en nuestra sabiduría interior.” Sofía, con una mirada cálida, añadió: “El amor y la compasión son la clave para sanar nuestras heridas.” Saúl, con una mirada profunda, concluyó: “La sabiduría y la percepción son necesarias para guiar nuestro camino.” Intercambio de Energía Chakral Con un gesto sincronizado, intercambiaron sus tokens. La energía chakral fluyó entre ellos a través de la modulación de las máscaras, creando un arco iris de luz que envolvió la Puerta de Alcalá. Sentían cómo sus propias energías se fortalecían y se equilibraban, transformando sus heridas analógicas en heridas digitales. Esteban, con su token rojo, intercambió energía con Linda, cuyo token amarillo complementaba su chakra raíz con el chakra plexo solar. Este intercambio permitió a Esteban modular su máscara de rechazo, transformándola en una virtud de liderazgo fuerte y justo. Linda, a su vez, sintió cómo su vitalidad se reavivaba, permitiéndole inspirar a otros. Bárbara, con su token azul celeste, intercambió energía con Raquel, complementando su chakra de la garganta con el chakra sacro. Este intercambio ayudó a Bárbara a modular su máscara de incomprensión, transformándola en una virtud de comunicación clara y efectiva. Raquel sintió una nueva claridad en su misión de inspiración y pasión. Pedro, con su token índigo, intercambió energía con Sofía, complementando su chakra del tercer ojo con el chakra del corazón. Este intercambio permitió a Pedro modular su máscara de duda, transformándola en una virtud de intuición y percepción. Sofía sintió cómo su corazón se llenaba de amor y sanación. Saúl, con su token violeta, intercambió energía con Esteban, complementando su chakra corona con el chakra raíz. Este intercambio permitió a Saúl modular su máscara de rechazo, transformándola en una virtud de sabiduría y percepción. Esteban sintió una nueva claridad en su misión de liderazgo. Además del intercambio de energía chakral, cada uno de ellos utilizó la energía de su propio chakra para sanar sus heridas emocionales particulares. Esteban, con su token rojo, se centró en su chakra raíz, sanando las heridas de rechazo y fortaleciendo su coraje. Vega, con su token amarillo, se enfocó en su chakra plexo solar, sanando las heridas de falta de vitalidad y fortaleciendo su alegría. Bárbara, con su token azul celeste, se concentró en su chakra de la garganta, sanando las heridas de incomprensión y fortaleciendo su capacidad de comunicación. Raquel, con su token naranja, se centró en su chakra sacro, sanando las heridas de falta de inspiración y fortaleciendo su creatividad. Pedro, con su token índigo, se enfocó en su chakra del tercer ojo, sanando las heridas de duda y fortaleciendo su intuición. Sofía, con su token verde, se centró en su chakra del corazón, sanando las heridas de desconfianza y fortaleciendo su capacidad de amar y compadecer. Saúl, con su token violeta, se concentró en su chakra corona, sanando las heridas de rechazo y fortaleciendo su sabiduría. Epifanía Poética en la Puerta de Alcalá  se llenó de una energía vibrante, y los siete amigos supieron que habían dado un paso importante hacia un mundo más equilibrado y consciente. Con sus energías chakrales proyectadas en el quantum sensorial, estaban listos para enfrentar cualquier desafío y continuar su camino de sanación. La epifanía poética que crearon resonó en el aire, donde los denotadores fácticos ligados a las heridas emocionales del pasado se entrelazaban con los connotadores poéticos de las máscaras del futuro, y los oximorones del presente se transformaban las máscaras en virtudes sanadoras. 

La meditación  panóptica terminó con un compromiso grupal: llevar esta energía transformada hacia sus vidas diarias, siendo agentes de cambio positivo en sus comunidades.


domingo, 30 de marzo de 2025

PLANO-CHAKRA DIGITAL RAÍZ 1.0 LUNES: MODULACIÓN DE LA MÁSCARA RECHAZO (ID.1)

 



Era una noche templada y vibrante en el corazón de Arcade Madrid, donde la arquitectura vanguardista y retro-futurista se fundía con pantallas interactivas que respondían a la energía de sus visitantes. En la sala inmersiva conocida como la Esfera de Reconexión Yi globe, un grupo de siete figuras se reunió en torno a un conjunto de hologramas pulsantes, emulando raíces en constante transformación. Estas eran las Personas-Chakra, cada una representando un aspecto único de la energía humana y digital. Liderándolas estaba Raúl Ximénez, el visionario creador del revolucionario Método Panóptico.

Raúl, con su presencia magnética y palabras cuidadosamente medidas, tomó el centro de la sala y comenzó a hablar con voz firme: "Hoy, lunes, estamos en sintonía con el chakra digital Raíz 1.0, el fundamento de nuestra estabilidad y la fuente de nuestras energías terrenales. Nos enfocaremos en la interacción con la máscara de rechazo, un componente diseñado para enfrentarnos a nuestras desconexiones y resistencias internas."

Las palabras resonaron en las Personas-Chakra como una descarga eléctrica que invitaba a una introspección profunda. En el cuadrante #1, la tendencia de la máscara de rechazo obligaba a cada individuo a confrontar sus patrones de arraigo y sus vínculos analógicos. Las raíces energéticas proyectadas por los hologramas no solo anclaban al grupo en su presente físico, sino que también revelaban las tensiones y las desconexiones que los mantenían estancados.

Silvia, en sintonía con el chakra Raíz 1.0, experimentó cómo la estabilidad que buscaba de manera constante se veía desafiada por las frecuencias que la máscara de rechazo proyectaba. En un momento de revelación, descubrió que el rechazo no era una barrera, sino una invitación a cuestionar sus propios límites. Por su parte, Sergio, guiado por la energía que fluía entre los cuadrantes y la máscara, observó cómo las proyecciones lumínicas lo confrontaban con sus propias defensas emocionales, llevándolo a un lugar de introspección profunda.

"El rechazo no es un muro," dijo Raúl, mientras las ondas energéticas de la sala se sincronizaban con sus palabras. "Es una puerta hacia una comprensión más profunda de nosotros mismos. En el cuadrante #1 exploraremos estas raíces dinámicas, mientras que en el cuadrante #2, con la cancelación, enfrentaremos las huellas energéticas que permanecen en nuestro inconsciente digital."

La Esfera de Reconexión, con sus proyecciones sincronizadas y su resonancia adaptativa, amplificaba cada vibración energética de las Personas-Chakra. Lo que comenzó como un ejercicio introspectivo entre los chakras y la máscara de rechazo se transformó en un viaje colectivo hacia la reconexión y la integración. Arcade Madrid no era simplemente un lugar; era un catalizador, un espacio donde lo analógico y lo digital se entretejían para enfrentar las desconexiones más profundas del ser humano.

"El equilibrio," concluyó Raúl, "no se encuentra en evitar el rechazo, sino en transformar esa energía en crecimiento y conexión." Con estas palabras, las luces interactivas y los hologramas se alinearon en un caleidoscopio de colores, reflejando el flujo armónico de energías en el grupo.

sábado, 29 de marzo de 2025

PLANO CHAKRA DIGITAL CHAKRA CORONA 7.0 DOMINGO: MODULACIÓN DE LA MÁSCARA DESCONEXIÓN ESPIRITUAL (ID.7)

 




Era una noche tibia y vibrante en Lavapiés, donde las luces de las calles bailaban junto al murmullo de conversaciones multilingües. En un pequeño restaurante con paredes cubiertas de grafitis y poesía urbana, siete figuras se reunían en torno a una mesa redonda. Estas eran las Personas-Chakra, cada una resonando con una energía única, un color, un propósito. En el centro presidía Raúl Ximénez, el poeta visionario que había concebido el revolucionario Método Panóptico.

Raúl, con una mirada penetrante y una presencia envolvente, se alzó ligeramente para captar la atención de los asistentes. Con voz pausada, comenzó a guiar la sesión. "Hoy pivotaremos entre los cuadrantes superiores #3 y #4", dijo, aludiendo a la configuración energética del chakra digital Corona 7.0, un portal de conexión universal con inclinaciones hacia la desconexión espiritual.

Con sus palabras, las Personas-Chakra sintieron cómo sus energías comenzaban a desplazarse. Raúl explicó que el cuadrante#3 representaba un estado de emisión expansiva, donde las energías irradiaban hacia el exterior como rayos solares. Sin embargo, al ingresar en el cuadrante#4, la dinámica se transformaba: las emisiones se disipaban, dejando espacio a una cancelación reflexiva, como si el Plexo Solar 3.0 decidiera inhalar el universo para reintegrarlo en su núcleo.

Los asistentes se sumergieron en el flujo energético. Amaya, con su vibración de chakra Raíz, sintió cómo la estabilidad que solía buscar adquiría una cualidad más efímera en el cuadrante 4, desafiándola a abrazar la incertidumbre. Al mismo tiempo, Iván, resonante con el chakra del Corazón, percibió cómo su capacidad de emitir amor sin límites se transformaba en una introspección callada, explorando los recovecos de su propia alma.

Raúl observaba, orquestando con palabras y gestos. "En esta danza de emisión y cancelación encontramos el equilibrio", dijo. "Es aquí, entre la exhalación y la inhalación de la energía, donde el verdadero sentido del método Panóptico toma forma. Somos individuos, pero también reflejos fragmentados del todo".

El restaurante, que al principio parecía ser solo un punto de reunión, se había convertido en un espacio donde lo espiritual y lo digital confluían. Las luces, ahora tenues, parecían vibrar al ritmo de la meditación colectiva. La sesión no era únicamente una exploración de cuadrantes y chakras, sino una experiencia de conexión y desconexión con uno mismo y con los demás, un recordatorio de que en la dualidad siempre hay un punto de equilibrio perfecto.

No obstante esta vez, Raúl tenía una invitación especial para el grupo: apelar al antichakra Corona 7.0.

"Con el antichakra," explicó Raúl, "podemos transformar la modulación de la máscara digital de desconexión espiritual en una sanación profunda de cada una de las heridas particulares. Este viaje nos llevará de los cuadrantes superiores #3  y #4 (del disco panóptico) hacia los inferiores #1 y #2" Los asistentes escuchaban atentos, sintiendo cómo sus energías se agitaban suavemente.

Raúl continuó detallando: "De este modo, pivotaremos entre la herida analógica del cuadrante#1 y la herida digital del cuadrante#2. En el cuadrante#1, recepcionaremos posibles energías opuestas pero complementarias, como la de los chakras Raíz 1.0 y  Plexo Solar 3.0. En el cuadrante#2, la cancelación en la recepción permitirá una conexión más profunda con nuestro inconsciente, donde podremos rastrear el origen de las heridas analógica (cuadrante#1) y   digital (cuadrante#2)."

Amaya, resonante con el chakra Raíz, sintió cómo la estabilidad que solía buscar adquiría una cualidad más efímera, desafiándola a abrazar la incertidumbre. Al mismo tiempo, Iván, sintonizado con el chakra del Corazón, percibió cómo su capacidad de emitir amor sin límites se transformaba en una introspección profunda, buscando sanar sus propias heridas internas.

Las energías del grupo comenzaban a fluir, como un río que encuentra su cauce. Raúl observaba con una mirada que parecía abarcarlo todo. "En esta danza de emisión y cancelación, entre los cuadrantes y las heridas, hallamos el equilibrio," afirmó. "Es aquí donde el verdadero propósito del método Panóptico se revela. Somos individuos, pero también reflejos fragmentados del todo."

El restaurante, que al principio parecía ser solo un punto de reunión, se había convertido en un espacio donde lo espiritual, lo analógico y lo digital confluían. Las luces, ahora tenues, parecían vibrar al ritmo de la meditación colectiva. La sesión no era únicamente una exploración de cuadrantes y chakras, sino una experiencia de conexión y desconexión, de sanación y transformación, un recordatorio de que en la dualidad siempre hay un punto de equilibrio perfecto.

PLANO-CHAKRA ANALÓGICO TERCER OJO 6.0 SÁBADO: SANACIÓN DE LA HERIDA DE INTUICIÓN APAGADA (id.6)

 



El sol de este sábado ascendía majestuoso, proyectando su luz cálida sobre Arcade Madrid, un espacio donde los encuadres del "desconocimiento" y del "conocimiento" tejían una narrativa universal. La herida de intuición apagada resonaba como un eco en los corazones de quienes exploraban los rincones del lugar, recordándonos aquello que buscamos comprender en nosotros mismos a través de cada experiencia interactiva.

En este espacio panóptico, el chakra analógico del Tercer Ojo 6.0 brillaba intensamente, guiando a los visitantes hacia una perspectiva más elevada mientras se sumergían en los mundos virtuales y analógicos que coexistían aquí. A través del efecto espejo que cada juego y experiencia proyectaba, cada crítica, cada incomodidad que sentíamos hacia los desafíos de los demás, se revelaba como una sombra interna, una pieza de nuestro ser que clamaba por ser iluminada. Era un espejo que no solo reflejaba, sino que también conectaba.

Los rincones receptivos de Arcade Madrid se abrían como un abrazo energético dispuesto a recibir. Las energías de los juegos clásicos y las experiencias inmersivas, opuestas pero complementarias, fluían hacia este espacio insondable. Los clásicos nos proporcionaban estabilidad y nostalgia, mientras que las ondas de experiencias modernas irradiaban innovación  y propósito que se propagaba por el WI-FI del  chakra 6.0.  Ambas fuerzas se entrelazaban, llenando cada vacío con vibraciones de emoción, conexión y creatividad, capaces de encender de nuevo una intuición apagada.

Así, el día se convirtió en un ritual de conexión y descubrimiento. Cada observación hacia los mundos proyectados en pantallas se transformaba en introspección; cada desafío evolucionaba hacia la aceptación de un sexto sentido, el instinto de conexión humana. El tercer ojo, como guía analógica, ayudaba a redescubrir los hilos invisibles que conectaban no solo los diferentes juegos y experiencias, sino también a los participantes entre sí.

En el umbral de esta saturación energética, un nuevo desplazamiento se intuía. Habíamos encendido la intuición, apagado lo innecesario y cancelado una recepción  que ya se sentía colmada por las experiencias vividas. Ahora, un nuevo nivel en Arcade Madrid nos esperaba, donde pivotábamos entre la armonía del tercer encuadre y la perfección del cuarto encuadre de una herida analógica que se transformaba en digital.

En este nuevo nivel, la recepción se volvía neutra y equilibrada. Nos observábamos nuevamente en un efecto espejo, pero esta vez bajo una luz renovada: las críticas o juicios hacia nuestros propios límites en los juegos revelaban partes de nosotros mismos que requerían trabajo y crecimiento. Era una invitación a aceptar estas energías, a integrarlas y a utilizarlas como herramientas para nuestra evolución lúdica y espiritual.

Las energías interactivas recibidas a través de Arcade Madrid cobraban sentido ahora, convirtiéndose en aliadas para llenar nuestros espacios interiores con fuerza, propósito y equilibrio. La danza entre el reflejo interior y la experiencia exterior seguía su curso, transformando cada momento en un paso hacia la totalidad de nuestro ser.

jueves, 27 de marzo de 2025

PLANO CHAKRA ANALÓGICO CORAZÓN 4.0 JUEVES: SANACIÓN DE LA HERIDA DIGITAL TRAICIÓN (id.4)R

 




En    "Arcade Madrid", un espacio hibrido  y moderno  ubicado en la capital, cinco almas se reunieron en torno a una mesa redonda. Cada uno era un "portador de chakras", un rol autoasignado que les confería una conexión especial con energías específicas. Al centro de la mesa se encontraba Raúl Ximénez, un poeta de voz pausada y ojos visionarios. Él no solo era el creador del método panóptico, sino también el alma de estas reuniones.

Raúl levantó una copa de agua con un gesto solemne. "Hoy es jueves," comenzó, con una serenidad casi ceremonial, "y nuestro foco está en el chakra analógico del corazón 4.0. Domina la herida de traición, nuestra guía en esta sesión. Nos ubicamos en el cuadrante número uno del disco panóptico, pues como los martes, con el chakra sacro 2.0, y los sábados, con el tercer ojo 6.0, el jueves requiere que enfrentemos y comprendamos nuestras heridas analógicas."

Un susurro de aprobación recorrió la mesa mientras sus compañeros asentían, envueltos por la profundidad de las palabras de Raúl. El poeta continuó: "Hoy aplicaremos el efecto espejo: ese fenómeno que nos revela que todo lo que criticamos o juzgamos en los demás es un reflejo de aquello que habita dentro de nosotros. Es hora de mirar hacia adentro y trabajar lo que nos duele, encontrar el origen."

El aire en Arcade Madrid pareció densificarse con la intención colectiva. Cada miembro del grupo compartió una experiencia dolorosa, una herida (analógica) aún abierta que resonaba con la traición. A través de la introspección y el método panóptico, encontraron conexiones entre sus relatos, como si las piezas de un puzle se unieran para mostrar un espejo más grande que reflejaba su humanidad compartida.

Raúl cerró la sesión con una sonrisa enigmática. "El jueves es solo el comienzo," dijo, "cada herida trae consigo una lección. Y cada lección, un paso hacia la sanación."

Las palabras de Raúl resonaban en las mentes de los presentes. El poeta se levantó, dirigiendo su atención al dispositivo que descansaba en el centro de la mesa. Con una mirada reflexiva, explicó:

"Estamos en el Cuadrante #1 del disco panóptico, el espacio asignado a las heridas analógicas. Aquí nos enfrentamos al binomio compuesto por dos encuadres fundamentales: el Encuadre_1, etiquetado como 'Desconocimiento', y el Encuadre_2, etiquetado como 'Conocimiento', desplazándonos linealmente al Cuadrante #2 con el Encuadre_3 y el Encuadre_4, con las etiquetas 'Armonía' y 'Perfección', respectivamente. Cada uno representa una posibilidad: un umbral de elección que nos desafía a explorar nuestra relación con la herida de traición y con la máscara que usamos para protegernos de ella."

Raúl hizo una pausa, permitiendo que el concepto se asentara. Luego prosiguió, con un tono ligeramente más enfático:

"Debemos elegir entre estos dos encuadres. Pero esta elección no es sin consecuencias. Al optar por uno, inevitablemente enfrentaremos una pérdida o ganancia de información. Si elegimos 'Desconocimiento', mantenemos ocultas las raíces más profundas de nuestra herida (analógica); renunciamos al acceso a cierta verdad dolorosa pero liberadora. En cambio, si seleccionamos 'Conocimiento', adquirimos claridad y comprensión, pero también debemos dejar ir la máscara (analógica) que nos protegía, asumiendo la vulnerabilidad que esto conlleva.

De la misma manera, se puede establecer la incertidumbre entre los encuadres tres y cuatro, es decir, entre la 'Armonía' y la 'Perfección'. Sin embargo, a diferencia del Cuadrante #1, en este Cuadrante #2 tratamos una incertidumbre entre una herida y una máscara digital. Por extensión, operamos de igual forma en el Cuadrante #3, con los Encuadre_5 (etiqueta 'Posibilidad') y Encuadre_6 (etiqueta 'Realidad'). Por último, está el Cuadrante #4, que cierra el disco panóptico con el Encuadre_7 (etiqueta 'Personas') y el Encuadre_8 (etiqueta 'Sistema'), con la cautela que en los Cuadrantes tres y cuatro (a diferencia de los cuadrantes  uno y dos) nos enfocamos en la máscara digital y analógica respectivamente.

El aire en Arcade Madrid parecía palpitar con la tensión del dilema. Raúl concluyó con una frase que resonó como una advertencia y una promesa: "Cada etiqueta indexa nuestra herida (analógica/digital) y nuestra máscara (analógica/digital). Al elegir, no solo seleccionamos un camino, sino que transformamos la forma en que entendemos nuestra identidad y la conexión con los demás. Aceptar la ganancia de información sobre la herida (analógica/digital) implica la pérdida de información sobre la máscara (analógica/digital). Y aceptar dicha pérdida trae consigo una luz más clara hacia la sanación de la herida (analógica/digital). Es el peaje que debemos pagar en este viaje a través del disco panóptico."