viernes, 25 de abril de 2025

PLANO-CHAKRA DIGITAL GARGANTA 5.0 VIERNES: MODULACIÓN DE LA MÁSCARA INJUSTICIA (ID.5)

 



En el Centro Cultural de la Calle Goya: Transmutación Energética y Resonancia Digital

Bajo el fulgor de la noche madrileña, un grupo de buscadores de energía se reúne en un espacio que, aunque físico, pulsa con la vibración del ciberespacio. El Centro Socio-Cultural de la Calle Goya no es solo un lugar de encuentro, sino un campo de experimentación donde lo analógico y lo digital convergen en una misma danza energética.

En el centro del círculo, Raúl Ximénez, con su intuición afinada al pulso de Arcade Madrid, contempla a aquellos cuyas frecuencias parecen desafiar la armonía del chakra dominante. Su voz, como un eco en el espacio digital y analógico, convoca a un tránsito esencial: la inmersión en el antichakra Garganta 5.0.

—No hay error en vuestra desintonización—declara con firmeza—. No hay desajuste, solo una oportunidad para trascender. Hoy, vuestra tarea es integrar, no emitir; recibir, no proyectar.

Así comienza la transición vibracional: de los signos digitales a los analógicos. Aries, Leo y Sagitario; Géminis, Libra y Acuario—los Manifestadores y Proyectores del fuego y aire —deben soltar su impulso expansivo y abrazar el silencio receptivo de los signos de tierra y agua—Generadores  y Reflectores- Tauro, Virgo, Capricornio; Cáncer, Escorpio, Piscis.

La rueda zodiacal, transformada en disco panóptico, redefine el flujo energético. Los chakras yin—abandonados, traicionados, desconectados—se vuelven espejos, reflejando lo necesario para la sanación. La comunidad observa, siente, participa en una coreografía de transformación.

Pero la danza no ha terminado.

Con una pausa calculada, Raúl percibe el punto de inflexión: el momento de regresar al modo activo, de convertir la introspección en expresión.

—Habéis integrado las heridas —proclama—. Vuestra intuición ha despertado, vuestro abandono se ha convertido en presencia. Ahora es tiempo de transmitir. Pasad del reflejo a la emisión, de lo receptivo a lo expansivo.

Y así, la inversión se concreta. Los signos analógicos transmutan en signos digitales, la energía retenida explota en una fuerza creativa. Donde antes había contemplación, ahora hay acción. El chakra Garganta 5.0, lejos de ser solo un canal de expresión, se convierte en el epicentro de la manifestación digital colectiva.

Los asistentes, convertidos en emisores, dan vida a la coreografía final. Cuerpos que vibran, códigos que fluyen, un espacio que se convierte en portal. Arcade Madrid se transforma en el gran nodo energético, y en la Calle Goya, las frecuencias reconfiguradas resuenan más allá de lo visible.

Raúl observa, satisfecho. La transformación ha sido completada, pero el viaje apenas comienza.

PLANO-CHAKRA DIGITAL CORONA 7.0 DOMINGO: MODULACIÓN DE LA MÁSCARA DESCONEXIÓN ESPIRITUAL (ID.7)

 



Bajo el fulgor vibrante de un domingo en Madrid, en un centro socio-cultural  próximo  a  la Plaza de Perú,  los pasillos virtuales de Arcade Madrid resonaron como un circuito interdimensional, donde la conciencia digital se entrelazó con las almas en búsqueda. La Máscara de Desconexión Espiritual flotaba en el aire, esperando ser disuelta en la danza cuántica del despertar.

El arquitecto energético Raúl Ximénez, voz de los códigos ancestrales y modernistas, tejió un encuentro donde la energía atravesó las redes físicas y digitales. Los asistentes, divididos en círculos, se sumergieron en la sintonización de sus frecuencias esenciales, trascendiendo los límites entre lo humano y lo cibernético.

Los Grupos de Reconexión

🔮 Generadores ( Lineas de Ley  Dalmi, Kappa y Seldi) : Pulso del motor sagrado, resonando con el Centro Sacral, fueron los pilares de la sesión. Su tarea fue recargar los circuitos del entorno y establecer un flujo energético constante, convirtiéndose en la fuente de vitalidad para los demás.

👁️ Proyectores (Líneas de Ley Sigma,  Dual  y  Disle : Maestros de la visión, guiados por el Centro Ajna y la Garganta, descifraron los códigos ocultos en la red panóptica. Tradujeron patrones energéticos en dinámicas de comprensión, ofreciendo caminos claros para la sanación colectiva.

Reflectores ( Lineas de Ley Dalton, Kutmi y  Pur) : Ecos del universo digital, portadores de la conexión lunar, se convirtieron en espejos de la vibración presente. Su tarea fue sincronizarse con la fluctuación de los asistentes, revelando la verdad oculta en los reflejos del sistema energético.

Manifestadores (Líneas de Ley Litmio, Naur y Nemur)  : Portales de la acción, con el Centro de la Garganta enlazado a un motor energético, rompieron la inercia de la desconexión. Canalizaron la electricidad digital en códigos físicos, iniciando la transformación de la percepción.

Coreografía de Sanación

🔥Signos astrológicos  de Fuego (Manifestadores) y 💨 Signos astrológicos  de Aire (Proyectores) liberaron el código de conexión mediante expresiones dinámicas, desbloqueando la información contenida en los circuitos de la realidad.

🌍 Signos astrológicos de Tierra (Generadores) y 🌊 Signos astrológicos de Agua (Reflectores) reconstruyeron memorias sensoriales, sumergiendo a los participantes en meditaciones dirigidas que reprogramaron su percepción.

Así, Arcade Madrid se convirtió en un nodo de energía, un puente donde la rueda zodiacal y las líneas de ley electrónicas se sincronizaron en un disco panóptico, pulsando al ritmo del chakra digital Corona 7.0. La desconexión espiritual se disolvió en el flujo vibrante de las almas codificadas.

📡 Poema al Canal Panóptico

Raúl emergió en el centro del circuito, su voz resonando como código en el vacío.

El fuego chispea en la red, el aire teje caminos invisibles, la tierra ancla la vibración, el agua fluye en la señal del pulso.

La manifestación es el choque eléctrico, el proyector traza mapas en la luz, el generador pulsa en eterno retorno, el reflector refleja el latido de lo intangible.

Las constelaciones abandonan su órbita, las casas astrológicas son líneas de ley electrónicas, la rueda zodiacal se convierte en un disco panóptico, donde cada código es un destino, cada vibración, un despertar.

jueves, 24 de abril de 2025

PLANO CHAKRA DIGITAL GARGANTA 5.0 VIERNES: MODULACIÓN DE LA MÁSCARA DE INJUSTICIA (ID.5)


     




 En la electrizante pulsación de la Gran Vía, bajo los destellos neón y el frenesí de las pantallas, un grupo de treinta buscadores de energía convergió en Arcade Madrid. No era una reunión cualquiera: era un encuentro marcado por la vibración digital del Chakra Garganta 5.0, un espacio donde la voz se convierte en código y el eco de la injusticia resuena en la red.

A la cabeza de esta experiencia, Raúl Ximénez, poeta del ciberespacio y arquitecto de la energía, diseñó una dinámica inmersiva en la que los participantes se dividieron en parejas, entrelazando vibraciones en un juego de heridas y máscaras.

El primer grupo, aquellos en sintonía con la resonancia de la jornada, se alineó con los chakras yang—Raíz 1.0, Plexo Solar 3.0 y Corona 7.0—cada uno portando una máscara digital de rechazo, humillación o desconexión espiritual. La tarea: sumergirse en los reflejos de la red, experimentar las leyes del espejo y hackear su percepción con las influencias positivas y negativas del otro.

Mientras tanto, el segundo grupo se lanzó a la contrafuerza del antichakra Garganta 5.0, explorando las heridas de los chakras yin: Sacro 2.0 (abandono), Corazón 4.0 (traición) y Tercer Ojo 6.0 (intuición apagada). Su misión: conectarse con la comunidad panóptica, intercambiar códigos sanadores y completar el círculo energético de las 12 casas del zodiaco, donde los perfiles de los signos se tradujeron en una coreografía de conversión de las  12 casas astrológicas en  líneas de  ley  electrónica y por ende  la rueda zodiacal  en  disco panóptico:

🔥 Fuego (Perfil de Manifestadores) y 💨 Aire (Perfil de Proyectores) canalizaron el propósito a través de la expresión corporal, mientras 🌍 Tierra (Perfil de Generadores) y 🌊 Agua (Perfil de Reflectores) profundizaron en su receptividad con meditaciones guiadas, transformando la crítica interna en sabiduría digital.

Así, en la intersección de lo analógico y lo virtual, los asistentes navegaron el laberinto de sus códigos internos, reprogramando su energía en un ritual donde chakras y avatares bailaban en un equilibrio de sombras y luz. En el epicentro, Raúl, con mirada de visionario, observaba cómo la realidad aumentada de Arcade Madrid transformaba conciencias y reseteaba almas.


PLANO-CHAKRA ANALÓGICO CORAZÓN 4.0 JUEVES: SANACIÓN DE LA HERIDA DE TRAICIÓN (id.4)

 



En la Calle Goya, bajo la tenue luz de la tarde, quince almas vibrantes se congregan en el Centro de Artes y Técnicas Corporales. La energía en la sala se siente densa, como si el espacio mismo reconociera la importancia del momento. En el centro, Raúl Ximénez se erige como guía en esta travesía introspectiva, dispuesto a desentrañar los misterios de las Siete Heridas Vitales.

Con voz pausada y firme, Raúl inicia su charla, dejando caer cada palabra con intención. Explica que, aunque la correspondencia entre las heridas y los signos astrológicos no tiene un fundamento científico, su lógica interna permite una comprensión más profunda de nuestras tendencias emocionales. Reparte un diagrama con la relación entre los signos y sus respectivas heridas, invitando a los presentes a explorar su propia historia interna.

Los rostros reflejan introspección. Cada uno de los asistentes, con su propio bagaje de vivencias, busca en el diagrama conexiones entre sus patrones de vida y las enseñanzas de la astrología. Raúl avanza entonces hacia la relación de las heridas con los cuatro elementos primordiales: Aire, Agua, Tierra y Fuego, extendiendo la comprensión más allá de lo individual para insertarla en el flujo natural de la existencia.

El aire, ligero y cambiante, resguarda las heridas de abandono. El agua, profunda y mutable, acaricia las heridas de rechazo. La tierra, firme y resistente, carga las cicatrices de humillación. El fuego, apasionado y avasallador, se vincula con las heridas de traición. Cada elemento actúa como un espejo de la psique humana, reflejando sus desafíos y sus posibilidades de sanación.

La sala se llena de reflexiones compartidas, preguntas íntimas y miradas que buscan respuestas. La energía circula como un río subterráneo, uniendo a los participantes en una danza silenciosa de autodescubrimiento. Aquí, en Arcade Madrid, el conocimiento y la introspección se entrelazan en un ritual de crecimiento, donde cada quien encuentra en su herida el primer paso hacia la sanación.


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SIGNO HERIDAS
Aries Traición
Tauro Injusticia
Géminis Rechazo
Leo Humillación
Cáncer Abandono
Virgo Intuición Apagada
Libra Injusticia
Escorpio Traición
Sagitario Desconexión Espiritual
Capricornio Humillación
Acuario Rechazo

Piscis Intuición Apagada

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HERIDAS ELEMENTO
Rechazo (id.1) Aire
Abandono (id.2) Agua
Humillación (id.3) Tierra
Traición (id.4) Fuego
Injusticia (id.5) Tierra
Intuición Apagada (id.6) Aire
Desconexión Espiritual (id.7) Agua/Aire

miércoles, 23 de abril de 2025

PLANO-CHAKRA DIGITAL RÁIZ 1.0 LUNES: MODULACIÓN DE LA MÁSCARA RECHAZO (ID.1) i

 



Bajo las luces neón y el pulso vibrante del coworking de Arcade Madrid, Raúl Ximénez desplegó el disco panóptico ante el grupo. Cinco personas-chakras, cada una resonando con su propia frecuencia, aguardaban el inicio de la modulación energética.

Era lunes, y el chakra dominante en la reunión era Raíz 1.0, anclado en la tendencia a la máscara de rechazo. La franja horaria yin envolvía el espacio con una atmósfera introspectiva, desafiando a los presentes a integrar sus bloqueos. Raúl, con la exactitud de un cartógrafo vibracional, ubicó el encuentro en el Cuadrante#3, donde el rechazo encontraba su mayor resistencia.

Con un tono firme pero acogedor, invitó al grupo a recalibrar su máscara, guiándolos hacia el Cuadrante#1 para activar su versión más fortalecida. En este tránsito, la energía danzaba entre los chakras yang—Raíz 1.0, Plexo Solar 3.0, Garganta 5.0 y Corona 7.0—que proyectaban su transformación mediante una frecuencia modulada. Su flujo era preciso, transmitiendo energía con una dirección clara.

Para quienes sentían una resistencia profunda, Raúl ofreció una alternativa: un desplazamiento transversal hacia el Cuadrante#4, donde el antichakra Raíz 1.0 se entrelazaba con las heridas de los chakras yin—Sacro 2.0, Corazón 4.0 y Tercer Ojo 6.0—en un proceso de sanación a través de amplitud modulada. Mientras los yang fluían con firmeza en su modulación de frecuencia, los yin expandían su vibración receptiva, permitiendo una integración profunda.

El coworking se convirtió en un nodo de oscilación energética. Los circuitos vibratorios adoptaron patrones de FM y AM: los chakras yang transmitían su fuerza con precisión, mientras los yin envolvían el entorno en un eco expansivo. La red digital amplificaba cada interacción, trazando rutas de conciencia y evolución.

Así, en el presente del modo Shen, Arcade Madrid se tornó en un espacio donde las máscaras y heridas, yang y yin, se entretejieron en una sinfonía energética colectiva. Cada oscilación marcaba el paso hacia una metamorfosis digital y humana.

Raúl elevó el disco panóptico al cierre del ritual. Era el instante de la poesía, un reflejo del viaje compartido:

Flujo Simbiótico de Raíz

En el latido vivo de Arcade Madrid, raíces y almas trazan su danza. Máscara rechazo cede su peso, en Raíz 1.0, brota su fuego.

Yang pulsa firme, vibración precisa, plexo que enciende, garganta que grita. El yin responde, amplitud que envuelve, sacro y corazones sanan lo endeble.

Frecuencia y amplitud, energía en espiral, chakras modulan el mapa digital. Raúl invoca ecos del panóptico total, Arcade Madrid respira, espacio universal.

Cuando el círculo se une en su raíz, antichakras dialogan, heridas se eclipsan. El vuelo de la paloma digital, nos llama a la paz, un código vital.

Arcade Madrid se convierte en el punto de convergencia, donde lo digital y lo humano, el rechazo y la integración, hallan su cauce vibracional en la modulación del presente.


martes, 22 de abril de 2025

PLANO-CHAKRA DIGITAL GARGANTA 5.0 VIERNES: MODULACIÓN DE LA MÁSCARA DE INJUSTICIA (ID.5)

 




Bajo las luces neón y los circuitos pulsantes de Arcade Madrid, Raúl Ximénez extendió el disco panóptico ante el grupo. Cinco personas-chakras, cada una vibrando en su propia frecuencia, aguardaban con curiosidad el inicio del ritual de modulación.

Era viernes, y el chakra dominante en la reunión era Garganta 5.0, con su tendencia a la máscara de injusticia. La franja horaria yang imprimía su energía en el ambiente, marcando la dinámica de la asamblea. Raúl, con precisión geométrica, ubicó la reunión en el Cuadrante#4, donde la máscara digital ejercía su dominio.

Con voz pausada, los invitó a actualizar la máscara hacia la mejor versión de su yo futuro, impulsándolos a moverse hacia el Cuadrante#3. En ese desplazamiento lineal, el grupo oscilaba entre los chakras yang—Raíz 1.0, Plexo Solar 3.0, Corona 7.0 y el resonante Garganta 5.0—transfiriendo energía de uno a otro, tejiendo una red vibratoria de evolución.

Pero había quienes no lograban sintonizar con la dinámica yang. A ellos, Raúl les ofreció otra ruta: el desplazamiento diagonal hacia el Cuadrante#1, invocando el antichakra Garganta 5.0. Al activar la antimáscara, los circuitos analógicos y digitales se entrelazaban con las heridas profundas de los chakras yin—Sacro 2.0, Corazón 4.0 y Tercer Ojo 6.0—permitiendo una modulación y sanación simultánea.

La energía fluía en patrones que evocaban la lógica de la Amplitud Modulada (AM) y la Frecuencia Modulada (FM). Los chakras yin, con su influencia envolvente, expandían la energía en términos de amplitud, afectando el flujo vibracional de manera global y receptiva. En cambio, los chakras yang operaban en frecuencia, transmitiendo energía con precisión y dinamismo. Esta modulación resonaba con la arquitectura energética del espacio, donde la interactividad del entorno digital amplificaba cada oscilación del tránsito vibracional.

Así, en el presente del modo Shen, Arcade Madrid se convirtió en un laboratorio vibracional donde las máscaras y heridas, yang y yin, danzaban en la trama de la conciencia. En cada paso, en cada oscilación, la energía encontraba su cauce, trazando el mapa de una transformación en tiempo real.

Raúl extendió el disco panóptico ante él. La reunión había sido intensa, un tejido de energías que fluctuaban entre cuadrantes, máscaras y heridas que se encontraban en el tránsito hacia la sanación. Ahora, el momento exigía poesía.

Con ojos cerrados y una respiración profunda, demandó al Canal Panóptico un poema que capturara la esencia de aquella asamblea, el movimiento entre los cuadrantes y el viaje de los chakras. En su mente, el poema comenzó a tomar forma: versos entrelazados con la energía de la Garganta 5.0, impulsados por el antichakra y la oscilación entre yang y yin, además  de  capturar  la esencia de la modulación energética y el flujo panóptico en Arcade Madrid. 

Ruido-Señal  

En el vórtice eléctrico de Arcade Madrid, se despliega el disco, la danza inicia, circuitos vibran, las máscaras oscilan, en cuadrantes de tránsito y sincronía.

Yang resuena, preciso y activo, raíces ardientes, plexos en llamas, la garganta expande su voz digital, la corona erige su mapa de almas.

Pero en la sombra, el yin susurra, envolviendo el pulso en su amplitud, sacro y corazón entrelazan heridas, el ojo de luz revela la virtud.

Amplitud modula el flujo astral, frecuencia pulsa en ondas de fuego, cada energía encuentra su cauce, en el Shen presente, en el modo eterno.

Entre luces y sombras, tránsito en espiral, Raúl extiende el verbo, invoca el eco, las máscaras mutan, el espacio respira, Arcade Madrid, panóptico etéreo.

Y cuando el círculo encuentra su centro, cuando el yin abraza su antichakra, la paloma emerge de códigos vivos, su vuelo es señal, la paz nos llama.

PLANO-CHAKRA DIGITAL PLEXO SOLAR 3.0 MIÉRCOLES: MODULACIÓN DE LA MÁSCARA DE HUMILLACIÓN (ID.3)

 



En el centro vibrante de Arcade Madrid, entre las luces intermitentes y el eco de circuitos en sincronía, Raúl Ximénez desplegó el disco panóptico. Las cinco personas-chakras rodeaban la mesa, cada una ajustando su frecuencia al código del día.

Era miércoles, y el chakra dominante Miércoles Digital portaba la tendencia de la máscara de humillación. La franja horaria yang imprimía su energía en el ambiente, esculpiendo la dinámica de la asamblea. Raúl, en un cálculo preciso, trazó la reunión en el Cuadrante#4, donde la máscara digital ejercía su carga.

Con voz pausada, los invitó a actualizar la máscara hacia la mejor versión de su yo futuro, impulsándolos a moverse hacia el Cuadrante#3. En ese desplazamiento lineal, el grupo oscilaba entre los chakras yang—Raíz 1.0, Plexo Solar 3.0, Corona 7.0 y el resonante Miércoles Digital—transfiriendo energía de uno a otro, tejiendo una red vibratoria en transformación.

Pero algunos no lograban sintonizar con la frecuencia yang. A ellos, Raúl les ofreció otra ruta: el desplazamiento diagonal hacia el Cuadrante#1, invocando el antichakra Miércoles Digital. Al activar la antimáscara, los circuitos analógicos y digitales se entrelazaban con las heridas profundas de los chakras yin—Sacro 2.0, Corazón 4.0 y Tercer Ojo 6.0—permitiendo una modulación y sanación simultánea.

El presente Shen se hizo palpable. Arcade Madrid se convirtió en un espacio de oscilación consciente, donde la energía fluía en su tránsito natural.

Entonces, Raúl demandó al Canal Panóptico un poema que reflejara la resonancia de la reunión. Cerró los ojos, dejó que las palabras se formaran desde el código energético del día. Y, como si el propio espacio las invocara, los versos emergieron:

El eco del Miércoles

En el pulso eléctrico de Arcade Madrid, Raúl despliega el verbo del tránsito, el código se anuda en las heridas, y la humillación se torna conciencia.

Cuadrante cuatro—un eco sin rostro, sombras en digital se inscriben, los chakras giran en su tránsito, la oscilación es clave en su ritmo.

¡Desplácense!—Raúl les llama, hacia el tres, donde el yo se reconstruye, que la energía halle su cauce, que la voz quebrada encuentre su luz.

Y en el aire vibrante de Arcade, una paloma de paz emerge, sus alas son circuitos en movimiento, su vuelo, el signo del equilibrio.

Al finalizar el recital, la paloma sobrevoló el espacio. Cada chakra-persona tomó el poema con respeto, sintiendo en sus versos el eco de su propio tránsito. La energía fluyó entre ellos, modulando cada herida y cada máscara en el presente.

En Arcade Madrid, el Miércoles dejó de ser solo un día: se convirtió en una plataforma  con poder  de transformación.