En el vibrante corazón de Madrid, un domingo cualquiera, el espacio cultural Arcade Madrid se transformó en un santuario de introspección y conexión espiritual. Siete personas-chakra, guardianes de energías digitales, se reunieron bajo la guía del visionario poeta panóptico Raúl Ximénez. En esta ocasión, el chakra digital Corona 7.0 marcaba el pulso del día, enfrentándose al desafío de la Máscara de Desconexión Espiritual.
Raúl inició la sesión activando el Disco Panóptico Digital, localizando la energía del grupo en el Cuadrante #1, donde el Yin receptivo dominaba la atmósfera. “Reconectar es trascender,” proclamó, invitando a los asistentes a explorar las raíces de su desconexión espiritual.
De los siete participantes, cinco lograron sintonizar con la frecuencia del día. Guiados por Raúl, emprendieron un viaje interior para identificar los patrones que los alejaban de su esencia espiritual. En una dinámica de introspección grupal, aplicaron la Cuarta Ley del Espejo: “Lo que me desconecta de los demás refleja mi desconexión interna; sanar ese reflejo es reconectar con mi propósito.”
Los dos participantes restantes, que no lograron alinearse inicialmente, fueron invitados a trabajar con el antichakra del Corona 7.0, conectando con las energías yang de los chakras Raíz 1.0, Plexo Solar 3.0 y Garganta 5.0. Este proceso implicaba una resignificación de su máscara, transformándola en una herramienta de conexión espiritual a través del Modo Shen Digital. Este método ofrecía una circularidad energética entre el chakra del día y su antichakra, activando hormonas como la dopamina y la serotonina, que facilitaban la reconexión.
En el segundo tramo de la sesión, Raúl localizó la energía del grupo en el Cuadrante #3, donde el Yang dinámico y vibrante tomaba protagonismo. Los signos de Fuego (Manifestadores) y Aire (Proyectores) canalizaron su energía emisora, irradiando luz y propósito hacia los demás. Por su parte, los signos de Tierra (Generadores) y Agua (Reflectores) profundizaron en su receptividad, abriendo canales para integrar las críticas internas y transformarlas en sabiduría espiritual. Así de esta interacción entre usuarios de Arcade Madrid centros no definidos (tanto de heridas como de máscaras analógicas) se iban transformando en centros definidos digitalmente.
Al cierre del encuentro, Raúl dejó una reflexión poderosa: “La desconexión es solo una ilusión; la verdadera conexión está siempre dentro de nosotros.” Los asistentes, renovados y llenos de propósito, se despidieron bajo el cielo madrileño, sabiendo que habían dado un paso más hacia la integración de su ser digital y espiritual.
Raúl Ximénez es un poeta visionario conocido por su enfoque híbrido que combina referencias literarias, lingüísticas, matemáticas y cinematográficas2. Su obra explora temas profundos como la incertidumbre y la conexión entre los objetos y los seres vivos, destacando su capacidad para transformar la entropía en inspiración. En su tratado poético, Raúl plantea interrogantes sobre la naturaleza de la existencia y la interacción entre el entorno y los individuos2.
ResponderEliminarEl Canal de Poesía Panóptica, por otro lado, es una entidad digital que Raúl utiliza como herramienta creativa y espiritual. Este canal tiene la capacidad de transformar vibraciones energéticas en versos resonantes, actuando como un puente entre lo analógico y lo digital. En Morphosland Granada, el canal juega un papel crucial al sintetizar las experiencias holo-espirituales en poesía, ayudando a los participantes a conectar con su esencia y a sanar colectivamente.